Voy hablarles de una ley bastante importante en cualquier sistema de Defensa Personal que hay que tener en cuenta: la ley de Hick-Hyman.
Les haré un rápido resumen: frente a un estímulo, cuantas más opciones tenga, más tiempo emplea usted en la elección de su respuesta; por tanto, mayor tiempo de respuesta.
Me explicaré, que les veo la cara de incertidumbre.
Lo llevamos a la Defensa Personal.
Ante un agarre de muñeca del que usted quiere liberarse, cuantas más soluciones/respuestas le hayan enseñado, más tardará en responder.
¿Ahora, sí?
¿Ve quién siempre tendrá la ventaja en un escenario continuamente cambiante?
Si practica Defensa Personal, pregúntese si su sistema aplica la Ley de Hick.
En mis casi 30 años de prácticas marciales he visto de todo.
Recuerdo movimientos coreográficos dentro de una sala en que solo nos hacia falta un poco de música para asemejarnos a bailarines.
Recuerdo varias respuestas ante un mismo ataque.
Recuerdo maneras de colocar el cuerpo según el ataque.
Recuerdo varias defensas según o ante un mismo ataque.
Recuerdo ver películas con escenas fantásticas e increíbles de combate.
Recuerdo….
En fin.
El último sistema de defensa al que me acerqué era más real, directo, simple, eficaz…
Urban Combat se llama.
La esencia de éste era que la solución a muchos estímulos externos era muy parecida o igual, violenta y a veces poco técnica pero efectiva.
Pocas florituras, vamos.
Pero cuidado, tipos de autodefensa similares, impartido por algunos instructores, no todos, no todos, matizo, también dejaban mucho que desear según su enfoque.
Por ejemplo, vea y oiga a uno de los mejores instructores de Krav Maga, Lior Offenbach, en el siguiente vídeo.
Su título, traducido: "El krav maga comercial es una mierda".
O sea que, no se crea que porque practica lo último de lo último y lo más de lo más, le vaya a servir en una confrontación real.
Hay sistemas de combate que vale la pena no profundizar en ellos ya que no sirven para defenderse ante un ataque real sin reglas fuera de un cuadrilátero.
Sigamos.
Inconformista, indagando por este mundo, también encontré el sistema SPEAR, creado por Tony Blauer.
Me encantan sus artículos. La realidad de su sistema. El pánico, el miedo, las reacciones instintivas del hombre primitivo. 50 años de práctica dicen mucho de él.
A lo que voy.
En uno de sus artículos leí que su sistema cumplía con la Ley de Hick.
Me lo creo.
Pocas veces lo he leído de cualquier otro sistema. En Combatives, por ejemplo.
Ojo, seguro que los hay.
Pensando en ello, creí necesario que mi práctica tenía que ir encaminada hacia esas leyes: simplicidad, eficacia, adaptar las mismas respuestas a escenarios diferentes, escasa colección de técnicas…
Y cómo no, no perder de vista la Ley de Hick, vamos.
Para terminar.
Un sistema de Defensa Personal que no tenga en cuenta el tiempo de respuesta no es aplicable ante un ataque criminal.
Un ataque que no tiene reglas, ni pactos, ni jueces, ni un escenario previo establecido.
Se lo recuerdo.
Un sistema de Defensa Personal que le ofrezca multitud de soluciones ante un mismo ataque no es un sistema que esté adaptado para la lucha real.
Un sistema de combate que no contemple un conjunto de principios y un número limitado de técnicas de lucha o autodefensa simples que se recuerden fácilmente y bajo presión no está adaptado para un ataque violento.
Al final, le llevará a la confusión.
Ante un sobresalto agresivo, no le saldrá, no recordará, ninguna de esas tantas técnicas practicadas.
Entrará en pánico. Se bloqueará al ver que no obtiene la respuesta.
Al final, su instinto, prevalecerá y se defenderá como humanamente pueda.
Recuerde: hay estrés; entra a participar la amígdala para procesar una reacción emocional al estímulo recibido; su proceso de análisis y respuesta no funciona como es debido; entra en funcionamiento la actividad motora gruesa, hay un gran bombeo de sangre hacia los músculos grandes...
¿Y usted va a poder pensar en cuál técnica elegir en ese momento?
No se engañe.
Si su preocupación es la autodefensa, elija bien.
Como ve, he querido aportar unos granitos de arena que forman el aglomerado de la Defensa Personal.
Unos granos que tiene que exigir y, al mismo tiempo, encontrar al buscar dentro de esa gran montaña de arena.
Y uno de ellos es la Ley de Hick.
Por último, el gran consejo.
Si tiene que usar la cabeza para una elección, ante todo que sea la de no pelear.
Evite la confrontación.
Y si no puede evitar o escapar de ella, entonces impóngase, domine la situación.