jueves, 8 de abril de 2010

Tentaciones y consecuencias III.


ZONA DEL SERRALLO

Entré pensando en orgías, escanciar vino y dos hostias bien metidas
Pues soy hombre apasionado, mujeriego, y algo baladrón
que dinero fácil obtengo actuando de brechero en partidas
acabando huyendo si se pone difícil la situación.

Días hay para reprocharse uno su pésima actitud
peor día es cuando enarbolan arma gumía
que para cobrar buscan herir mi cuerpo inerme y con gran exactitud
y que yo, por estafar, haya de pagar con íntima parte mía.

¡Maldita hija de mora meretriz!

Haciendo mal fortuna jodiendo en zona del Serrallo
Viéndose engañada me dio golpe certero quedándome sólo la raíz
Y del mortal corte se me fue parte de mi preciado tallo
resultándose algo tan pequeño similar a mi nariz.

Todo comenzó consiguiendo gran capital
Que quise yo gastar en zona del Serrallo
Pensando en algo tan vital
Como fornicar con mujer de poco arrullo.

Ya ahora aquí me veis, sesgado de tallo
Quedándome suelto y al aire algún genital
Esperando que alguien me saque vivo del Serrallo
Y que si da tiempo me lleve vivo al hospital.

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